Una campaña más el Parque Nacional de Picos de Europa acogió a nuestras voluntarias entre sus valles y blancos picos calizos venerados por los celtas y que protegieron a sus gentes de un sinfín de batallas.
Recorrer cada rincón de la parte asturleonesa, conocer a sus gentes, sus tradiciones y oficios, ayudar a entender la influencia del cambio climático en la calidad fisicoquímica y biológica de los ríos… En definitiva, adentrarse en el corazón del primer Parque Nacional declarado en nuestro país.
10 días de voluntariado dan para mucho y nuestras voluntarias aprovecharon al máximo cada momento:
Día 1: La campaña dio el pistoletazo de salida con la llegada de las voluntarias a Cangas de Onís. El primer día es un día de nervios e ilusión, donde las voluntarias y los monitores comienzan a conocerse, en ese momento el voluntariado es un lienzo en blanco que día tras día se irá pintando con el trabajo, las experiencias y los recuerdos.
Es el día de presentaciones y puesta al día de lo que se va a hacer durante el voluntariado.
"Estoy agradecida, me habéis cambiado la vida. Me ha encantado toda la gente con la que hemos hablado. Se me saltaron las lágrimas cuando hablaba Gerardo el de Fundación Quebrantahuesos. LAURA
Día 2: Comenzar el día dando un paseo por el valle del Mazuco y posteriormente disfrutar de una interesantísima jornada con Xuan Valladares es todo un placer.
Xuan es un ganadero que maneja sus vacas como antaño, en extensivo, y que tuvo la generosidad de explicarnos la historia de su entorno, como llegó a vivir ahí y cómo realiza su actividad ganadera, mientras disfrutábamos de un agradable paseo por su finca. No solo nos habló de ganadería, sino también de naturaleza, ecología y sostenibilidad.
"Me ha gustado mucho conocer el Parque Nacional desde dentro. Distintos enfoques y las distintas charlas de los distintos agentes del parque" MARÍA
La motivadora charla de Xuan se completó muy bien con la comida en el Roxín, restaurante de comida sostenible.
El broche al día lo puso la realización de taller de Sensibilización ambiental "Conociendo la vida del río" con Emburria, una asociación que trabaja en la integración de personas con discapacidad intelectual ¡Fue muy emocionante conocer la pasión y el cariño que sienten al conocer todos los seres vivos que habitan el lecho de sus ríos!
Día 3: Fue hora de ponerse los vadeadores y comenzar con los muestreos de macroinvertebrados. Este primer día de muestreos las voluntarias muestrearon tres puntos del río Duje y empezaron a tomar contacto con estos insectos tan útiles y necesarios para conocer que está pasando en nuestros ríos de alta montaña a causa del cambio climático.
"Un voluntariado muy polifacético con un gran valor añadido que es conocer a las personas que viven en el territorio y las diferentes experiencias" ALBA
Día 4: Fue el momento de que las voluntarias conociesen a Amparo Mora, técnico Superior del Área de Conservación del Parque Nacional. Amparo les habló de la gran biodiversidad que presenta el parque y de la importancia de conservar las actividades tradicionales como los prados de siega, para que esta biodiversidad no se ve menoscabada.
Tras esta interesante charla, se les habló a las voluntarias de la importancia de la geología que forma los Picos de Europa y la historia que surge alrededor de ellos.
Por la tarde, con la intención de que conozcan de primera mano unos de los oficios tradicionales de la zona, fuimos a ver a Pepe Bada, afinador de queso Cabrales, con quien pasamos una tarde muy interesante conociendo su oficio desde dentro: visitando una de las cuevas, probando sus quesos, aprendiendo como los afinaba, ect. ¡Desde luego una experiencia única!
"La Casa de la Montaña, uno de los alojamientos donde hemos dormido, era como estar en casa" LOLA
Para cerrar el día hicimos la ruta hacia Bulnes ¡Lástima que la tormenta no nos dejase completarla!
Día 5: En el ecuador del voluntariado, disfrutamos de una mañana con los técnicos y el presidente de Fundación Quebrantahuesos, conociendo la fauna de los Picos de Europa y al quebrantahuesos en el centro de visitantes.
Para completar la charla subimos con los técnicos de la fundación a los Lagos de Covadonga para intentar avistar a algún quebrantahuesos. Desafortunadamente, y debido a la lluvia y la niebla no pudimos ver ninguno.
"Agradezco la gran oportunidad de hablar con la gente local, conocer como mantienen el entorno y sus costumbres" CRISTINA
Aprovechando que ya estábamos en los lagos, hicimos una ruta hacia la majada de Belbín, donde pudimos comprobar in situ el tradicional de ganada y charlar con una de las ganaderas. Fue una ruta exigente debido a la lluvia, el granizo, barro… pero nuestras voluntarias eran todas unas aventureras y aguantaron sin problemas.
Día 6 y 7: Ya en la parte leonesa, el sexto día se continuó con los muestreos, en esta ocasión del río Sella.
Para descansar del intenso día de nuestros anterior, en el séptimo día, pudimos disfrutar y conocer, de la mano de Larry, guía del parque, las tradiciones de la comarca de Posada de Valdeón y la historia, cómo surgió y cómo funcionaba el chorco de los lobos. ¡Un placer haber compartido esa mañana con el! ¡Nos contagió su entusiasmo por ese paisaje!
"El voluntariado ha superado todas mis expectativas. Agradezco la calidad humana de los monitores" MAR
Y por la tarde tocó muestreo en dos puntos del río Cares.
Día 8: ¡Un día rodeados de mariposas! Pasamos la mañana con una de las guías del parque, Alicia, que nos enseñó a reconocer las mariposas más comunes de la zona y con quien hicimos uno de los transectos que ella muestreaba cuando le tocaba hacer censos.
Tras pasar una mañana muy divertida e interesante, por la tarde se terminaron los muestreos del río Cares.
"Me han encantado los paseos divulgativo y el gran conocimiento de los monitores" MARIA
Día 9: Juego de las chapas, rayuela, futbol, adivinanzas… Aprender jugando es la mejor forma de aprender. Por este motivo las voluntarias, junto con los monitores, idearon y adaptaron juegos tradicionales para que los niños y padres de Posada de Valdeón aprendiesen sobre los macroinvertebrados y el Parque Nacional de una manera divertida.
Como punto final a esta extraordinaria aventura se realizó un tramo de la ruta del Cares.
Día 10: Fue el momento de las despedidas y recordar todo lo vivido ¡Fue un placer compartir estos 10 días con las voluntarias y toda la gente que colaboró con nosotros!
